Si usted se encuentra con vecinos molestos, debe proceder de la siguiente manera, en primer lugar de manera amistosa puede solicitar a sus vecinos que dejen de realizar esas actividades ruidosas que perjudican la buena convivencia.
Si ante la anterior acción los vecinos, no dejaran de realizar las actividades molestas, puede comunicarlo al Presidente de la Comunidad de Propietarios para que sea él, que proceda a instar la cesación de las actividades molestas para los vecinos.
Si las acciones anteriores, no tuvieran eficacia puede proceder a denunciar ante el Ayuntamiento para que tramite la correspondiente sanción administrativa, que en algunos casos como en Madrid, por reiteración en la ordenanza, puede llegar a los 3.000 euros. Esto conlleva que agentes especiales de la policia municipal midan el impacto medioambiental en su casa, es decir, los decibelios que se soportan, establecidos por ley y desarrollado por cada una de las ordenanzas municipales.
La última vía sería emprender acciones judiciales, ya sea por la vía civil mediante un procedimiento especial de cesación de actividades molestas, que puede acabar con la condena de los vecinos a abandonar el inmueble, o también la vía penal por entenderse las actividades ruidosas con una atentado contra derechos fundamentales de los ciudadanos.
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